Frase de la vida:

El ayer es un recuerdo; el hoy es un regalo y el mañana un misterio...

viernes, 30 de marzo de 2012

El dolor es infinito cuando algo termina...
cuando el alma se vacía...
cuando se pierde la esencia de lo que fue
y lo que no volverá a ser...

porque el dolor es mortal...
al punto del placer...
tal vez sabía que sería así..
y por eso no quería acabar..

pero el dolor sigue siendo infinito cuando se llega a amar...
de verdad amé?... fue solo ilusión?...
no lo sé... ni mi corazón... que ahora partido en recuerdos...
ni mi mente que anonadada no piensa...
ni mi cuerpo que gélido se consume...

porque el dolor es permanente
aunque fuego me prendiese y mi carne se quemase
seguiría frío... en un punto tal vez entre la luz y la oscuridad...

porque aun cuando use máscaras...
estas se partirían como en el desierto seco...
porque aun con sonrisas estas son hielo
porque estaré solo,
solo como muelle viejo en invierno...

domingo, 25 de marzo de 2012

resurección..

Y vuelves a sangrar...
y los siglos se desvanecen en mis hombros
en el grito se disuelven los momentos...
cuando todos en busca de nuevas tierras
abandonan lo que un día fue...
lo que jamás volverá a ser...

Y caes una vez más..
y vas con las voces del final..
hoy que el día feneció, recorre tu dolor...
con los alaridos del ayer...
incógnitas sin resolver...
Respuestas perdidas en un cristal
lágrimas que vuelan con las horas...

Y vuelves a buscar...
pero no estas...no estamos...
y yo... lleno de terror deambulo
cortando las ganas de esperar...

y una vez más desconcertados quedamos...
sin saber en que momento se rompió...
sin saber cómo fui preso de tuyo...

Esta vez vuelves a sangrar...
y esta vez no me someteré más...
ahora dejaré en libertad tu vida...
tu pensamiento..
y hoy toca morir...
hoy tu sangre tocará mis labios..
y no habrán lagrimas...
hoy que la noche nace....
vienen a mi los gritos del ayer...
anunciando lo que fue y volverá a acontecer...

y en un pestañeo se disuelve tu vida...
y en un latido muere mi corazón..
y en un paso resucita mi pavor...