lamento... alarido.... dejado en el tiempo..
por aquel recuerdo.. que me embarga y me lleva...
a trabes del cuento...
hechizado por ti... tu alma envuelve la mía
tu voz con mi voz... entonan la marcha sepulcral...
del adiós dejado en el baúl del pasado
vida no vivida... tiempo perdido... y gastado
en la elocuencia maldita de tu mirada...
en la jodida vida... en la peste de tu aroma...
en tu vida... en mi vida... en ambos..
la culpa recae... recae y nos deja... recae...
y nos golpea... hiendo recordar...
haciendo llorar..
haciendo rogar... nunca antes como hoy...
nunca antes como ayer..
ni como mañana... aunque incierto sea
el dolor pesa...
pesa al igual que un mundo..
al igual que mi cruz...
en eso me convertiste...
En la cruz invertida
que llama al demonio inmerso en mi interior.......
Y es cierto que a veces esa persona que estimábamos la fuente de nuestro desvelo, de nuestras pasiones más intempestivas, resulta ser la misma que nos crucifica continuamente con sus desaires, con su abandono, con su indiferencia...
ResponderEliminar... las cruces invertidas tienen su belleza, querido amigo.
Besos
te doy toda la razón querida amiga... un abrazo enorme...
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